El País[…] los enseñantes tienen más bajas por enfermedad, presentan más episodios de ansiedad y consumen el doble de tranquilizantes que la población general.Con mucha frecuencia la formación produce un gran placer a los formadores. Casi cualquier dolor (físico, emocional o social) desaparece cuando estamos en el aula, intentando formar a alguien. Ver ese brillo en sus ojos cuando acaban de descubrir “algo”, percibir esa satisfacción y ese entusiasmo, reflejados en todo su cuerpo, cuando confirman intuiciones, hipótesis, formas de hacer. Escuchar sus debates, argu…