Cuando, a principios de la década de los 80 se empezaron a rentar las bases de lo que habría de ser la reforma de la enseñanza y, sobre todo, cuando ésta empezó a ser experimentada pocos años después en algunos centros de toda Cataluña, aparecieron dos factores -como mínimo- que hacían posible la existencia del llamado bachillerato musical -bachillerato de artes, itinerario musical, utilizando una terminología más correcta-, una aspiración que se había dejado sentir en muchas ocasiones y en ámbitos distintos. Estos factores eran la existencia de bachilleratos diversificados, …