Best sellers , El código da VinciEste proceso formativo no es nada más ni nada menos que la educación simbólica, una actitud ante el conocimiento, un proceso lento y en cierto modo inacabado, que nos distingue, nos hace miembros y partícipes de una comunidad y nos sitúa en la cúspide respecto al resto de seres vivos. El ejercicio simbólico desarrolla capacidades comunes a muchos campos de conocimiento, una educación transdisciplinar que podríamos denominar competencia simbólica. Dicha competencia no aparece como tal en la LOE, aunque podríamos relacionarla con otras competencias…