¿Qué he pretendido?
A menudo suele ser difícil en educación cumplir los objetivos que se pretenden. A menudo no se consigue lo que se pretendía porque cuando se define lo pretendido se idealiza la llegada; al final no todo resulta según lo previsto y se produce una sensación de no utilidad, de inutilidad…, en definitiva, una cierta frustración. Y es que la educación es algo tan complejo que el poner una maquinaria en marcha no es garante del éxito, por muy bien que se haga. ¿Para qué digo todo esto? Simplemente porque lo que he escrito en el siguiente párrafo ha de entenderse …