DIDACTICA DE LOS PROCEDIMIENTOS

La distinción que en la propuesta curricular elaborada como desarrollo de la LOGSE para la educación obligatoriase hace entre contenidos referidos a conceptos, procedimientos y actitudes, contribuye, por una parte, a recordar la necesidad de que todos ellos estén presentes tanto en las unidades didácticas como en las actividades que se desarrollan en la escuela, y exige específicamente, por otra, la presencia de tales contenidos, bajo la forma que se considere más adecuada, en los currículums que finalmente establezcan las distintas administraciones educativas.

Trabajar el lenguaje con los niños es, realmente, un reto emocionante. Descubrir, junto a ellos, todos los procesos que ello implica es la tarea más gratificante que un maestro o maestra encuentra en su trabajo diario. Si además trabajamos en una escuela infantil 0/6 y tenemos la oportunidad de hacer un seguimiento del desarrollo del lenguaje desde que el niño empieza a emitir sus primeros sonidos, gestos, la mirada, sus primeras palabras, su jerga, para después oírles esos primeros intentos de frases hasta llegar, ya a los 3-4 años, a inventarse historias, contarnos sus cosas, comunicarse con los demás... es realmente gozoso.

La intención del presente artículo es mostrar la concreción de un proyecto de enseñanza y aprendizaje inicial de la lecto-escritura, centrada en la comprensión, en la producción de escritos y en el aprendizaje del código de la escritura como auxiliar en ambos procesos. El proyecto se inscribe en la experimentación de una propuesta de educación lingüística para el primer ciclo de Primaria, que encuentra continuidad en un proyecto más amplio para las etapas Primaria y Secundaria, y es continuación del trabajo realizado en la E. Infantil. Se lleva a cabo en el Colegio ""Martí Sorolla"" de València, con el asesoramiento de personal del Equipo del Programa de Reformas Experimentales de la Consellería de Educación de la Generalitat Valenciana.

¿Cuáles son los contenidos que deben desarrollarse a través de la educación en Ciencias? Se trata de una cuestión, de un problema, que la mayoría de profesores se han planteado a lo largo de su actividad profesional. En una primera aproximación, podemos aceptar que debemos pretender el aprendizaje de una gran variedad de conocimientos (su comprensión y aplicación), capacidades de investigación y habilidades técnicas, y movilizar un conjunto de actitudes, valores y normas en relación a la conducta, opiniones y forma de pensar de nuestros alumnos.

César Coll (1987) define el procedimiento como: ""conjunto de acciones ordenadas y finalizadas orientadas hacia la consecución de una meta"". Esta definición remite el concepto de procedimiento al concepto de acción. Es claro, pues, que el procedimiento es un tipo de acción. Pero es precisamente en este punto donde comienzan las dificultades. El concepto de acción entendido desde un punto de vista psicomotriz parece que puede unirse al de transformación o cambio de una situación. La transformación vendría a ser la película frente a la situación, que sería la diapositiva. Por lo que se refiere a la Matemática, estos cambios suelen afectar a la cantidad o a la situación espacial de los objetos. Así, meter canicas en una bolsa, sacar lápices del estuche, entrar en el autobús pueden considerarse acciones en las que el cambio o transformación se hace sobre la cantidad de objetos presentes; caminar, saltar, dar vueltas, altera, en cambio, la situación espacial de los objetos que se mueven.

Es necesario aclarar dos cuestiones fundamentales antes de reflexionar sobre los procedimientos en la educación artística. La primera aclaración pertinente, en los removidos tiempos que vivimos (antesala de una Reforma que se quiere sea duradera), es la correcta definición de la Educación Artística, tanto para la etapa de Educación Primaria, como para Infantil y Secundaria. (A lo largo del artículo me referiré, preferentemente, a la Educación Infantil y a Primaria).

La Historia es una disciplina plural y su estudio puede y debe abordarse con espíritu científico. Por sus características, la Historia se interesa por cualquier fenómeno que haya ocurrido en el pasado. Esta característica fundamentalmente implica que las fronteras de la Historia con otras ciencias o disciplinas, consideradas en una perspectiva diacrónica, sean muy difíciles de delimitar. Matizando, podríamos decir que, en numerosas ocasiones, la Historia y otras ciencias sociales convergen sobre los mismos objetos de estudio, si bien ésta tiende ala coordinación de los fenómenos particulares en interpretaciones más globales. Las dificultades epistemológicas intrínsecas de la Historia se han agravado cuando ha tenido que adaptarse a la divulgación escolar o educativa. La historia de la Historia, como materia de enseñanza, es contradictoria alternando momentos de grandeza y de miseria. La Historia ha estado presente desde los orígenes de la construcción de los aparatos de enseñanza europeos en sintonía con el desarrollo de proyectos de estado-nación capitalistas a partir del siglo XIX.

Reflexionar acerca de las funciones y características que deben tener los instrumentos de programación de la práctica docente supone plantearse previamente la pregunta de si son en verdad necesarios dichos instrumentos, o más exactamente cuestionar hasta qué punto el esfuerzo que supone su elaboración está justificado por la mejora que pueden introducir en la calidad de la educación.

En Estados Unidos, los años 60 representan una época intensa de innovaciones en educación. Era una forma de enfrentarse con los problemas sociales que estaban emergiendo y se pensaba que podrían solucionarse si se aplicaban una serie de reformas escolares. La primera propuesta de innovación se planteó a mediados de los años 50 y la realizó la National Science Foundation. Reunió a científicos, psicólogos y pedagogos con el fin de transformar de manera radical la enseñanza de las ciencias y las matemáticas. La innovación consistió en sustituir la necesidad de enseñar un corpus de conocimientos científicos por un nuevo enfoque centrado en la búsqueda y el descubrimiento por medio de la experimentación. Esta orientación pretendía formar a los estudiantes tanto para que fueran buenos científicos como para acceder a carreras técnicas, promover una alfabetización científica y preparar a cada individuo para que actuara de forma más efectiva en una sociedad cada vez más tecnologizada.

¿Empezar por lo que se hace o partir de las grandes decisiones? La propuesta con carácter normativo de un nuevo instrumento de planificación para los centros educativos puede convertirse fácilmente en una carga burocrática más que añadir a otras ya existentes. Si tenemos en cuenta, además, la inseguridad que origina el proceso de elaboración de un instrumento que es novedoso, al menos en sus aspectos formales, no es exagerado pensar que aquello que es solamente un medio tienda a convertirse en un fin en sí mismo; y, consecuentemente, que los aspectos formales de su elaboración sean lo prioritario.

El Colegio Rural Agrupado ""Alto Jiloca"" es un centro disperso en cuatro localidades, Alba, Singra, Torremocha y Villafranca, próximas entre sí y cuyo eje geográfico lo constituye el río Jiloca; los recursos económicos de la zona son la agricultura y la ganadería. La carencia de cualquier otro tipo de recursos hace que estas localidades vean reducida día a día su población. Las escuelas no son ajenas a esta problemática. Dos son unitarias, Singra y Torremocha; Alba tiene dos aulas, una con alumnado de Preescolar y Ciclo Inicial y otra con Ciclo Medio y Ciclo Superior; en Villafranca existen tres aulas, una de Preescolar y Ciclo Inicial, otra de Ciclo Medio y otra de Ciclo Superior. Por estas características, nuestro CRA siempre ha buscado un método pedagógico que integrase a alumnos de diferentes niveles en una misma aula, por lo que nuestra metodología se centra en unidades didácticas globalizadas o en centros de interés con actividades de dificultad variable.

La elaboración del Proyecto Curricular de Etapa debe poner en marcha un proceso compartido de formación-innovación, en un equipo educativo, mediante el cual se inicie la reflexión e indagación sobre la práctica educativa del grupo a partir de la teoría que, de manera más o menos explícita, la sustenta. Como consecuencia de ese proceso formativo se irán tomando, paulatinamente, decisiones curriculares que, a la larga, configurarán el Proyecto Curricular de Etapa en ese Centro/ Zona. La elaboración del PC, su desarrollo y posible reformulación en función de él, se convierten así en el punto de partida y llegada del desarrollo de un plan de formación en el seno del equipo educativo.

En las siguientes líneas vamos a presentar los datos sobre el sistema educativo vasco que consideramos más significativos para ofrecer un cuadro de la situación suficientemente real, sabiendo que la elección de unos y de otros supone una selección siempre discutible.

Tras esta presentación general de los argumentos relativos a cómo y hasta qué punto la convergencia en torno a los principios explicativos constructivistas pueden contribuir a hacer más satisfactorias y fluidas las relaciones entre el conocimiento psicológico y la teoría y la práctica educativas, conviene ya que pasemos a profundizar algunos aspectos de dichos argumentos que pueden resultar particularmente polémicos. Comenzaremos por el tercero que, como hemos dicho, afirma que es posible, deseable y útil adoptar los principios constructivistas como un marco psicológico global de referencia para la educación escolar a condición de tomar una serie de precauciones que eviten los riesgos derivados de un intento integrador de esta naturaleza, en especial los que conciernen a las tentaciones de eclecticismo, dogmatismo y reduccionismo psicologizante que han teñido casi siempre las relaciones entre la Psicología y la Educación. Y lo haremos apoyándonos en la utilización que se ha hecho del constructivismo en el actual proceso de reforma del Sistema Educativo español, más concretamente en lo que concierne al planteamiento curricular adoptado en él.

Los procedimientos siempre han formado parte del currículum escolar en cualquier nivel educativo, y en los centros sigue siendo cosa muy normal considerar los algoritmos, las técnicas, los hábitos, las destrezas, los métodos, etc., como objeto propio de la enseñanza. Quiere esto decir que siempre se ha planteado como meta de la educación escolar que el alumno se haga más competente en sus actuaciones.