Se marchó de Lleida ciudad a Maials, un pueblo de menos de mil habitantes a 36 km de la capital de El Segrià, por amor. Sin embargo, al principio no fue fácil: acostumbrada a la privacidad de la ciudad, la sorprendía que vecinos todavía desconocidos la saludaran o le preguntaran de qué casa era. Hoy, diecisiete años después, afirma orgullosa que es de Maials. I habla con el mismo orgullo de su escuela rural, donde los cursos se desdibujan para acoger a niños y a niñas de diferentes edades, «personitas» como dice ella, en una misma clase.
Olga Parés es la directora de la escuela Otogesa, de…